Lo más destacado del Gobierno de López Obrador en 2021 (y los retos que le esperan el próximo año)

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El año pasado estuvo marcado por las crisis sanitaria y económica, pero ya este empezamos a ver la luz al final del túnel con los programas de aplicaciones masivas de vacunación que han sido un éxito en México, ya que actualmente el 90 % de las personas adultas cuentan con un esquema completo (vacuna y refuerzo) que ha permitido que las hospitalizaciones y cuadros graves disminuyeran enormemente. Sin duda, este programa de vacunación, encabezado por Hugo López Gatell, fue la mejor noticia del 2021 para los mexicanos.

En cuanto a temas políticos y sociales, el gobierno de López Obrador llegó a la mitad del camino, teniendo como línea divisoria las elecciones intermedias de junio donde estuvieron en disputa la mitad de las gubernaturas del país (15 de 32), así como la renovación total de la Cámara de Diputados.

A nivel territorial, Morena –el partido político que fundó López Obrador– ganó 11 de las 15 gubernaturas, pasando de seis estados a 16 de un total de 32, además de ser mayoría en más de la mitad de los congresos locales. Cada año que pasa, Morena se afianza con más fuerza en el interior del país, que es donde hace más eco el mensaje del presidente. En la Cámara de Diputados perdió algunas diputaciones, pero mantuvo la mayoría del Congreso. López Obrador, a pesar del desgaste del ejercicio de gobierno, mantiene una aprobación del 70 % a nivel nacional.

El que México actuara con independencia y autonomía en la CELAC y la Iniciativa Mérida puso tensos a muchos intelectuales que sostenían que vendrían represalias de parte de EE.UU. Sin embargo, López Obrador demostró que entiende más de geopolítica que la mayoría de los “especialistas”.

En el plano nacional, el Instituto Nacional Electoral y su consejero presidente, Lorenzo Córdova, han dado mucho de qué hablar por haber abdicado en sus tareas de ser un árbitro imparcial y mostrarse como un actor político más, con actitudes facciosas, rijosas y nada democráticas. Ha entrado en disputas hasta con la Suprema Corte de Justicia y su petulancia le está haciendo un tremendo daño a la institución de la cual forma parte. Es poco probable que sus actitudes cambien, por lo que se hace cada vez más necesaria una reforma electoral que corrija los excesos de este personaje y algunos de sus escuderos.

En el plano internacional, López Obrador ha sabido mantener un punto de equilibrio entre el Norte, con el que se comparte geografía, y el Sur, con el que hay una mayor idiosincrasia en común. En septiembre, México fue sede de la VI Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y había mucha expectativa por esta reunión, donde se especulaba que podía discutirse a profundidad el reemplazo de una obsoleta y decadente Organización de Estados Americanos (OEA) que siempre actúa defendiendo los intereses de Estados Unidos en la región. México, país anfitrión y presidente pro tempore de la CELAC, además, invitó al presidente de China, Xi Jinping, a dar un mensaje para la región.

Apenas unas semanas después de la reunión de la CELAC, hubo un encuentro para temas de seguridad en la Ciudad de México entre funcionarios estadounidenses y mexicanos. Lo más relevante fue que se sepultó la Iniciativa Mérida, que había puesto en marcha el gobierno conservador de Felipe Calderón –de la mano de Estados Unidos– en su polémica y fallida lucha contra las drogas. El que México actuara con independencia y autonomía en los temas de la CELAC y la Iniciativa Mérida puso tensos a muchos intelectuales que sostenían que vendrían represalias de parte de Estados Unidos. Nada de eso. En noviembre, hubo una reunión trilateral (México, Estados Unidos y Canadá) en Washington donde el trato entre Biden y López Obrador fue muy diplomático y hasta amigable. El mandatario mexicano demostró que entiende más de geopolítica que la mayoría de los “especialistas”.

Lo que viene el próximo año

Esto es parte del balance de 2021. Para 2022, las prospectivas en México se centran en la reactivación económica que se empezó a poner en marcha en el último trimestre de 2021, pero que no ha tenido la celeridad esperada debido a la incertidumbre que ha habido alrededor de la variante ómicron. Afortunadamente, México cuenta con las vacunas necesarias para aplicar un tercer refuerzo de las vacunas, algo que se hará masivamente a partir de enero de 2022.

Para la reactivación económica, México ha destinado un presupuesto sin precedentes para la infraestructura. En marzo de 2022 se inaugurará el nuevo aeropuerto internacional Felipe Ángeles y para julio está programada la puesta en marcha de la refinería de Dos Bocas. También se avanzará enormemente en el Tren Maya, en la península de Yucatán, y en el Tren Transístmico, que cruzará el Istmo de Tehuantepec, dos proyectos de comunicación en el Sureste mexicano.

Es probable que para este 2022 veamos el despunte de quien se perfila como la aspirante preferida del obradorismo: Claudia Sheinbaum, alcaldesa de la Ciudad de México y quien podría convertirse en 2024 en la primera mujer presidenta de México.
En el plano político, habrá elecciones en seis estados: Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Todo parece indicar que Morena ganará en todos, a excepción de Aguascalientes, que es el que tiene menos habitantes de los seis que estarán en juego. Es decir, Morena dará un paso más en su consolidación nacional y pasará a gobernar 21 de las 32 entidades federativas del país.

La batalla ideológica más importante se dará en el poder legislativo durante el primer semestre con la propuesta de reforma eléctrica, que se presentará en abril en la Cámara de Diputados y que estará precedida de al menos 300 asambleas informativas en todo el territorio nacional para que la gente sepa el contenido de la propuesta. La iniciativa contempla reformas constitucionales para que la industria eléctrica nacional vuelva a tener un papel preponderante dentro de la generación de energía, ya que propone preservar la seguridad y autosuficiencia energéticas como condición para garantizar la seguridad nacional y el derecho humano a la vida digna.

Todos estos nuevos retos los enfrenta López Obrador con cambios en el gabinete que hizo a lo largo del segundo semestre para tener un equipo mucho más cohesionado y que trabaje para la transformación del país. Es un equipo más compacto y obradorista, por así decirlo. Y aunque faltan dos años para la definición de la candidatura presidencial, es probable que para este 2022 veamos el despunte de quien se perfila como la aspirante preferida del obradorismo: Claudia Sheinbaum, alcaldesa de la Ciudad de México y quien podría convertirse en 2024 en la primera mujer presidenta de México.

Columna publicada originalmente en Actualidad RT